¿Qué pasa cuando nombramos la violencia obstétrica? Las redes de matronas y activistas han logrado que sus reivindicaciones lleguen hasta las instituciones: el gobierno español plantea una reforma de la ley del aborto que reconozca el problema y proponga soluciones estructurales. En este capítulo, conocemos a las mujeres que lo están haciendo posible.
Lucía Si nos escuchas con auriculares, podrás apreciar que este pódcast está mezclado en binaural. Te invitamos a que lo pruebes.
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Francisca Este es tu expediente. Estoy leyendo el caso otra vez.
Teresa Yo tenía muy claro que tenía que denunciar y dar guerra, toda la que haya que dar. Pero no sabía los pasos... Me acuerdo cuando hablé contigo, que me decías los pasos. Y yo digo: «Vale, vale». Las reclamaciones al hospital... Pues lo que haya que hacer.
Claudia
Comenzamos este capítulo donde terminamos el anterior, con la historia de Teresa, una mujer que fue sometida a una cesárea sin ninguna justificación, al principio de la pandemia.
Junto con Francisca Fernández, está preparando la estrategia para denunciar ante los tribunales.
A Francisca la conocimos en el tercer capítulo de este pódcast. Es abogada, experta en derecho sanitario y ha dedicado su carrera a la defensa de mujeres víctimas de violencia obstétrica.
Francisca Bueno, sabes que el sevicio no ha respondido. Admitieron la reclamación de responsabilidad patrimonial pero no han contestado.
Entonces, están esperando a que les demandemos, lo cual me parece muy lamentable.
Claudia En este capítulo, vamos a entender mejor el proceso de reforma de la ley de salud sexual y reproductiva que está promoviendo el Ministerio de Igualdad para contaros el impacto de la lucha de mujeres como Francisca tiene sobre las políticas públicas.
Soy Claudia Reig y esto es Parir en el siglo 21, un documental de Barret Cooperativa.
Francisca ¿Cómo vamos a acreditar que habías llegado en dilatación completa?
Teresa Pues la matrona. Abrió la mano entera y dijo: «Está completa». No sé si llegó a escribirlo, o igual sí lo escribió y lo que no escribió fue que estaba en segundo plano.
Francisca Aquí dice: «Está dilatada completa».
Teresa Sí, eso fue lo que dijo. Y alguien dijo: «Pues aquí mismo, que está el set de partos...». Y entonces dijo la ginecóloga: «Para quirófano, para quirófano».
Y me dijeron: «¿Tienes ganas de empujar?». Y yo: «Sí, que la echo, que la echo». Y fue cuando me tumbaron. Veo la sábana azul y digo: «No, no, no. No me hagáis una cesárea». Pues eso, en cuanto vi... «¿Qué estáis haciendo?».
«Te estoy diciendo lo que quiero. Escúchame, por lo menos. ¿Que no puede ser...? Pero dímelo. Dime algo, no me ignores».
Claudia El servicio de ginecología había activado dos días antes un protocolo que decía que había que someter a una cesárea a todas las mujeres infectadas de coronavirus que estuvieran de parto.
El motivo: se supone que la cesárea es más corta que un parto vaginal, y por tanto el riesgo de contagio para el personal es menor. Y esto es lo hicieron con ella: sin mediar explicación, la arrastraron al quirófano y le hicieron una cesárea que no necesitaba.
Teresa «O sea, ha sido para protegeros vosotros, por menor tiempo de exposición, que al final ha sido más que si me hubieseis dejado parir». Y al final, solo uno me reconoció que sí.
Francisca Además, el propio perito dice que va contra la ética, lo que te han hecho. Que no solamente es mala praxis...
Teresa Que es absurdo, dice exactamente.
Francisca Además, habla de los riesgos aumentados de la cesárea para el bebé, que es algo que la gente no conoce. Se piensa: «Bueno, total, ¿de qué te quejas?».
Teresa Como me dijeron al segundo día: «Mujer, ¿tanto supone para ti una cesárea?».
Francisca Es que es impresionante que una cosa tan grave, la traten con tanta banalidad.
Teresa En cuanto me subieron, desde que estaba sola en la habitación, era... «Esto lo tengo que denunciar. Esto es denunciable».
Francisca O sea, ya mismo sentías que...
Teresa Desde ese momento, yo digo: «No sé si cómo ni con quién. No sé nada pero sé que lo tengo que denunciar».
Francisca Yo me identifico mucho contigo porque tú eres el típico caso de mujer que dice: «No, no. Me da igual el resultado, es algo que hago porque lo tengo que hacer».
Teresa Sí, sí. Pues eso. Si va para adelante, bien; si va para atrás, no, pero bueno...
Francisca Para atrás nunca va a ir, esto va a ir para adelante. Además, me da igual el juzgado en el que recaiga, porque es un caso de derechos humanos. Entonces, vamos a ir donde haya que ir.
Claudia Más allá de la negligencia médica, de la mala praxis clínica, organismos internacionales como la ONU o la OMS han advertido sobre estas vulneraciones de los derechos humanos, en todo el mundo.
España no es una excepción, y de hecho está condenada por la ONU por ejercer violencia obstétrica sobre una mujer. Es uno de los casos que explicábamos en el tercer capítulo.
Francisca Llevé a Naciones Unidas cuatro casos de mujeres en los que, primero los profesionales de la salud, después la administración y después los jueces, les negaron sus derechos a tomar decisiones.
El Comité para la eliminación de la discriminación contra la mujer de Naciones Unidas dictaminó que le había fallado el sistema y que lo que le había ocurrido se llamaba violencia obstétrica y era un problema estructural y de derechos humanos.
Lamentablemente, la abogacía del Estado, cuando el Comité le pidió explicaciones sobre qué medidas había implementado para evitar que estos casos ocurrieran en el futuro, dijo que las decisiones del Comité no eran vinculantes y que no iban a cumplir.
El Ministerio de Igualdad ha dicho que va a hacer una ley en la que va a incluir la violencia obstétrica... Yo no quiero leyes, yo quiero realidades.
Toni Morillas Es una obligación que tenemos como institución. Tenemos un mandato por parte del Comité CEDAW que, como país, como gobierno de España, debemos atender...
Claudia Escuchamos a Toni Morillas. Es la directora del Instituto de las Mujeres español. Hace referencia al Comité CEDAW, el Comité para la eliminación de todas las formas de discriminación contra las mujeres de la ONU. Fue el organismo que condenó a España en el caso litigado por Francisca.
Toni Morillas Fue un caso de denuncia de una mujer española que sufrió una serie de malos tratos en su parto. Esta mujer denuncia y el CEDAW establece un dictamen que dice que en nuestro país hay derechos que no se están garantizando de una manera efectiva.
Claudia El CEDAW, en su sentencia, daba una serie de recomendaciones para que el Estado español asegure los derechos de las mujeres durante sus embarazos y partos.
Toni Morillas Esto es así. Y que haya una institución que dice que esto existe, tiene nombre y requiere de una regulación normativa que lo reconozca, es clave. Sobre todo para validar experiencias profundamente traumáticas, en muchos casos. Es fundamental que este proceso sirva también para eso.
Claudia Su intención es incluirla dentro de la reforma de la ley de salud sexual y reproductiva, conocida como “ley del aborto”.
Oimos ahora a Irene Montero, Ministra de Igualdad. Estamos en el Congreso de los Diputados, en junio de 2021, y la ministra anuncia esta propuesta, entre otras.
Irene Montero Para los próximos meses llegará a las Cortes Generales la ley de garantía integral de la libertad sexual, la ley “solo sí es sí”. Estamos trabajando en una ley integral contra todas las formas de trata y estamos trabajando también en la reforma de la ley del aborto, de salud sexual y reproductiva, para incorporar la violencia obstétrica y la explotación reproductiva como formas de violencia contra la mujer.
Claudia En abril de 2022, casi un año más tarde de aquella intervención en el Congreso, Ana Requena conversa con la ministra Montero en un acto de elDiario.es.
Ana es la redactora jefa de Género de este medio digital, y le preguntó a la ministra sobre esta reforma. Las escuchamos.
Ana Requena Quería preguntarte por esa reforma de la ley del aborto, de derechos sexuales y reproductivos. La idea es ampliar lo que se entiende por derechos sexuales y reproductivos e incluir algunas definiciones.
¿Qué es lo que se va a considerar violencia obstétrica, o violencia ginecoobstétrica?
Irene Montero Como está en negociación, voy a ser muy prudente. Pero no es una definición que nos tengamos que inventar, porque Naciones Unidas ya ha reconocido la violencia obstétrica como una forma de violencia contra las mujeres.
De hecho, el año pasado condenó a España por un caso concreto de violencia obstétrica que se ejerció contra una mujer, que exigió sus derechos y la ONU se lo ha reconocido.
España tiene un compromiso con los organismos internacionales, que nosotras tenemos la obligación de recoger en nuestra legislación y en nuestras políticas públicas, no solo en las leyes.
Es parte de la reparación que, como instituciones, podemos hacer a tantas mujeres que han vivido violencia obstétrica o prácticas inadecuadas...
Claudia Irene Montero se refiere, una vez más, a la respuesta de la ONU al caso de Sara, el que Francisca elevó hasta este organismo. Ana Requena sigue preguntando a la ministra.
Ana Requena Parece que hay ciertas resistencias a que acuñemos ese término.
Irene Montero Yo preguntaría qué avance en políticas públicas feministas no se ha encontrado con resistencias, y creo que no se nos ocurre ni uno solo.
Todos los avances feministas y todas las políticas públicas que se han conquistado, se han conquistado. Claro que hay resistencias. Pero que es una cosa que, por no nombrarla, no va a dejar de existir, también es verdad.
Yo creo que la labor de las instituciones es reconocer lo que las mujeres nos están diciendo, lo que el movimiento feminista nos está diciendo, los profesionales sanitarios nos están diciendo y también los organismos internacionales.
Claudia También le preguntamos a Toni Morillas sobre las polémicas que suscita el simple reconocimiento de la existencia de la violencia obstétrica.
Toni Morillas Con este tema hay mucho debate, como todo lo que tiene que ver con los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres.
Se debate y se cuestiona mucho que tengamos reconocido el derecho al aborto, se debate y se cuestiona mucho que tengamos garantizado el derecho a un parto respetado, en el que se respete la capacidad de decisión de las mujeres y de algo que, por parte del feminismo hemos reivindicado históricamente, que es la soberanía sobre nuestros cuerpos, que es la soberanía sobre nuestras vidas.
Claudia Para elaborar el borrador de esta reforma, el Instituto de las Mujeres ha estado meses reuniéndose con diferentes colectivos, profesionales sanitarias y también activistas por los derechos sexuales de las mujeres.
En esta fase consultiva, ha sido muy importante escuchar las vivencias que las mujeres relatan de sus partos. Le preguntamos a la directora del Instituto qué ha significado para ella escuchar estas historias, a menudo terribles.
Toni Morillas En el momento que abríamos el debate en torno a qué sucede en los paritorios, había un montón de mujeres levantando la mano: «A mí me pasó esto, me pasó aquello...», contando experiencias. Esto me ha ocurrido en muchos de los encuentros que he tenido.
Hay prácticas violentas que hemos vivido, que teníamos absolutamente normalizadas. Algunas, de mi propio proceso de parto. Es fundamental para que muchas mujeres, cuando escuchan a otras mujeres, digan: «A mí también me pasó eso».
Teresa Lo tengo que contar porque, a veces, es la necesidad de contarlo a alguien que no conozco de nada. Se lo cuento y es como... “ya lo largué, hasta el siguiente”.
Claudia Volvemos con Teresa y Francisca. Están en este proceso de poner en común sus experiencias y hablar de las secuelas que han sufrido.
Teresa Sí, estoy yendo a terapia y estoy mejor pero bueno...
Francisca Yo iba intentando salvar a las embarazadas por la calle. Me da vergüenza recordarlo. Iba a El Corte Inglés, a la sección de embarazadas, a dar folletos de El parto es nuestro.
Teresa A ver, que yo sé que, con el tiempo...
Francisca Pero no te lo crees, ¿verdad? Cuando estás ahí...
Teresa Sí, porque ha pasado año y medio ya y...
Francisca Yo sufrí estrés postraumático después de una situación que fue muy dura, pero distinta, y tardé cuatro años en recuperarme. Y yo decía: «¿Cuándo se va a pasar esto?». Porque tú no quieres estar ahí.
Y le decía a Ibone Olza, la psiquiatra: «¿Pero cuándo...?». Y me dijo: «Es largo».
Ibone Olza Y cuando me estaban tratando tan mal en aquel paritorio, que a mí ya se me olvidó lo que estaba pasando, se me olvidó que iba a nacer mi hija, recuerdo que, llorando, a la matrona que me estaba gritando, le respondí: «¿Cómo puedes tratarme así? ¿Cómo podéis tratar a nadie así?». Y creo que llevo 19 años intentado responder a estas dos preguntas.
Claudia La que habla es Ibone Olza, la psiquiatra a la que se refería Francisca. Es doctora en psiquiatría y está especializada en salud mental perinatal, es decir, salud mental en relación con el embarazo, el parto y nacimiento, y el puerperio.
Ibone participa en el foro Vía Láctea sobre maternidad y crianza, en agosto de 2020.
Ibone Olza Después de aquella experiencia tan dolorosa, tuve la suerte, y por eso siempre lo nombro, de que en aquel postparto tan durísimo me acompañaran y sostuvieran otras madres.
Lo que hacíamos, sobre todo, era contarnos nuestras historias. Porque estábamos muy heridas y porque, contándolas, sanábamos.
Claudia Francisca e Ibone se conocen de aquella primera lista de correo electrónico que se llamó “apoyo cesáreas”.
Ibone Olza Fui madre muy joven, cuando estaba formándome como psiquiatra. Tuve a mis dos primeros hijos mientras hacía la especialidad y la tercera, poquito después.
A raíz del tercer parto, que fue bastante traumático, empezamos con otras madres un foro de apoyo a madres que habían tenido partos traumáticos, que se llamaba “apoyo cesáreas”. Y dos años después, en 2003, surgió la asociación El parto es nuestro.
Claudia Cuando llegaron a las 1000 participantes, se dieron cuenta de que era necesario organizarse y crearon la asociación El parto es nuestro.
Con el tiempo, El parto es nuestro se ha convertido en un referente en la lucha por los derechos de las madres y criaturas.
Ibone Olza El parto es nuestro ha sido, para nosotras, una escuela. Empezamos a recibir a muchísimas madres con partos muy traumáticos, madres que habían salido muy dañadas.
Y escuchando estos relatos, empezamos a investigar qué pasaba con el parto, con el modelo de atención al parto. Y una de las preguntas que nos hacíamos era: «¿Cómo es posible que a tantas de nosotras nos hayan hecho tanto daño, nos hayan dicho cosas tan feas, nos hayan dejado solas, o nos hayan humillado?».
Y cuando escuchas tantos relatos, te das cuenta de que es un problema endémico. Nosotras veníamos diciendo esto desde principios de este siglo, pero finalmente se ha reconocido la violencia obstétrica como ese daño que hacen los profesionales sanitarios.
Claudia El parto es nuestro es uno de los colectivos que han participado en el proceso consultivo del Instituto de las Mujeres, para la reforma de la ley de salud sexual y reproductiva.
Toni Morillas Las mujeres de El parto es nuestro, que vienen desde hace muchísimos años haciendo un trabajo –que, bajo nuestro punto de vista, es importantísimo– de denuncia pública y de acompañamiento a las mujeres que han sufrido situaciones de violencia en el proceso de parto.
Ibone Olza Empezamos a nombrar la violencia obstétrica y, al inicio, generó mucho rechazo. Sigue generando mucho rechazo, porque muchos profesionales se sienten muy ofendidos. Obviamente, los profesionales que trabajan en la sanidad no tienen vocación de hacer daño ni de ser violentos. Tienen vocación de ayuda y de cuidar.
Por eso, es importante comprender que la violencia obstétrica es estructural. Está en la forma de trabajar, en la forma en que se nos enseña, en cómo nos forman, cómo se ve a la mujer desde la medicina.
Pero antes no se cuestionaba, entonces muchas profesionales muy buenas entraban con unas ganas enormes de aprender, formarse y ayudar, y salían horriblemente traumatizadas, sintiéndose cómplices de este maltrato que no podían nombrar.
Toni Morillas Muchos profesionales con los que nos hemos encontrado nos decían: «Yo he participado de procesos de violencia obstétrica sin saberlo». Porque los protocolos incorporaban prácticas que podían ser constitutivas de formas de violencia, o poco respetuosas con las mujeres.
La mayoría de los profesionales están comprometidos con garantizar el derecho a la salud de las mujeres. Por tanto, tenemos que poner los instrumentos para que esto sea efectivo.
Sole ¿Hola? Sí, este sí que va. Yo soy Soledad Carreguí, matrona supervisora del paritorio del Hospital de La Plana. Y espero que esta tarde podamos cargarnos de energía para impulsar esto que son los centros de nacimiento.
Claudia Sole interviene en el congreso de la Federación Española de Matronas. Es octubre de 2021 y estamos en Logroño, en el auditorio del Palacio de Congresos de La Rioja.
Sole Mi hospital muestra cómo un hospital público puede atender partos de forma fisiológica y hacer acompañamientos, y tenemos unos indicadores maravillosos: 7% de episiotomías, menos de un 15% de cesáreas... Pero aun así, tenemos una contaminación hospitalaria...
Claudia El paritorio del hospital de La Plana, liderado por Sole, lleva más de 20 años impulsando una atención humanizada y respetuosa para las mujeres que dan a luz allí.
Aun así, Sole conoce las limitaciones de la asistencia hospitalaria, que tiene la tendencia a medicalizar el proceso de parto, aun cuando no es necesario.
El modelo de centro de nacimientos propone un cambio sustancial: es un espacio sin médicos, dirigido solo por matronas.
Sole Yo creo que los centros de nacimiento son una vacuna preventiva sobre la violencia obstétrica. Es muy importante que impliquemos a las usuarias para que empiecen a reclamar otro tipo de asistencia.
Sole Los centros de nacimiento van a favorecer la fisiología propia del parto, en un entorno no medicalizado pero sí seguro. Cercano a un hospital, comunicado, por si existe alguna complicación.
Pero también garantiza este ambiente más domiciliario y con una atención muy personalizada por parte de las matronas.
Sole Ay, ya estáis aquí. Perfecto.
Matrona Yo creo que estamos aquí de una manera informal...
Claudia La promoción de los centros de nacimientos ocupa ahora mismo mucho del trabajo de Sole fuera del hospital.
En el congreso, un grupo de matronas se reúne y discute la estrategia que están siguiendo para conseguir convencer a las responsables políticas de que se impliquen en la mejora de la atención al parto.
Sole Estuve en la reunión con Irene Montero y la palabra de centros de nacimiento apareció por muchos foros. Las propias mujeres veían como algo preventivo para evitar la violencia obstétrica y que la mujer pueda elegir el lugar de nacimiento.
Lucía Alcaraz Por más que trabajes los derechos, si una mujer va a un hospital y le dicen que la inducen o, si no, el riesgo de todo lo que le puede pasar a la criatura es inmenso... ¿Qué hace? Se induce.
Matrona Y las matronas, si ejercemos como defensoras de esos derechos, vamos a ser blanco. Y somos blanco.
Claudia Están presente la polémica generada por el concepto de violencia obstétrica y las negativas a aceptarlo por parte de algunas instituciones médicas.
Se han pronunciado, negando la existencia misma de este problema, algunos colegios de médicos, también el Consejo General que los agrupa, además de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia.
En cambio, asociaciones de matronas y su Federación reconocen el problema y asumen el término.
Matrón Le tienes que quitar el liderazgo a alguien que ya lo tiene.
Lucía Alcaraz ¿De dónde viene el liderazgo de estos equipos? Por ejemplo, la Primaria en Catalunya, que es un Primaria potente con matronas que tienen muy claras sus competencias... a decir: «Vamos a liderarlo desde un hospital, con una jerarquía de enfermería, que la matrona está bajo esa jerarquía»...
Claudia La última matrona que ha hablado es Lucía Alcaraz. Lucía coordina Casa Leitània, uno de los primeros centros de nacimientos públicos del Estado, situado en el hospital Germans Trias de Badalona.
Lucía Alcaraz Yo te puedo decir, aquí y ahora: yo he ejercido violencia obstétrica. Y era una indignación, decir: «¿Qué estoy haciendo en la sala de partos? Estoy poniendo oxitocina a una mujer que no quiere que se se la pongamos, una vía a una mujer que no quiere que se la pongamos...».
Y qué pocas herramientas tengo yo, desde mi formación, para negarme a esto. Es muy doloroso.
Sole Nosotros, por ejemplo, hacíamos episiotomía a todas las mujeres. No había mujer que saliera del paritorio sin una episiotomía. Soy fruto del modelo de formación que he recibido. He ejercido violencia obstétrica, claro que sí.
Es un término que no gusta a una parte importante de los profesionales pero hay que reconocerlo y hay que mejorarlo.
Lucía Alcaraz A muchas personas les choca y les duele, porque cuando no tienes intención de hacer daño, te parece que eso no es violencia.
Claudia Como decíamos, varias agrupaciones médicas han rechazado el término, negando su existencia. Pero en Catalunya, la Sociedad Catalana de Ginecología y Obstetricia, y el Consejo de Colegios de Médicos, emitieron un comunicado conjunto.
Reconocen que el término genera rechazo pero también recuerdan que está reconocido por organizaciones como las Naciones Unidas o la Comisión Europea.
Carmina Comas Es cierto que es un término que sugiere intencionalidad. Pero cuando decimos «no dañar», tenemos que entender que hay muchas formas diferentes de daño y muchas de ellas no son conscientes ni visibles.
Claudia La Sociedad Catalana de Ginecología ha creado oficialmente el Grupo de trabajo en Violencia Obstétrica y Perspectiva de Género en Salud. Su coordinadora es la ginecóloga Carmina Comas.
Carmina Comas Desde la incomodidad del término, no queremos parar el debate en el término. Por eso, desde diferentes sociedades profesionales creemos que debemos estar presentes en este debate. Y para eso, antes, debemos hacer también investigación.
Claudia Carmina Comas es jefa de obstetricia en el mismo hospital de Badalona donde trabaja Lucía Alcaraz.
Lucía Alcaraz Hicimos una encuesta en el hospital, no sé si te lo explicó Mina Comas. Preguntábamos si la habías visto ejercer: «Has visto que alguien entre en el paritorio sin presentarse? ¿Hacer un tacto vaginal sin pedir permiso? ¿Poner oxitocina sin consentimiento?».
Y todo era que sí. Todas habían visto, todas... ¿Sabes? Era brutal.
Carmina Comas Hace 30 años, cuando yo empecé, realizábamos prácticas que se creían de valor clínico, que con los años hemos aprendido que no aportan ningún valor y que generan un intervencionismo innecesario.
Lucía Alcaraz Sobre todo, porque las mujeres no quieren ser tratadas así.
También hablan de que, si aceptamos este término, lo que haces es crear desconfianza entre las mujeres y los obstetras. Y para mí, eso es una burrada. Perdona que te lo diga así de claro.
Precisamente reconocerla y decir: «Voy a ser consciente de lo que he hecho hasta ahora, para no repetirlo...».
Carmina Comas El problema no es el procedimiento que hacemos sino cómo lo realizamos, cómo lo explicamos. Y eso requiere unas habilidades comunicativas que la mayoría de profesionales no tenemos.
Quizá, el reto actual no es tanto aprender más como desaprender aquello que no ayuda y que incluso puede llegar a perjudicar.
Claudia Volvemos al congreso de matronas en Logroño. En la reunión, Sole propone una estrategia común para todas las entidades de matronas que asesoran al Ministerio de Igualdad en la reforma de la ley.
Sole Queremos solicitar una reunión con la Ministra, antes de que salga el borrador, y tendríamos que pedirla para ya.
Matrona ¿Para hablar de...?
Lucía Alcaraz ...la reforma de la ley.
Sole ¿Ahí también plantearéis vosotros lo de los centros de nacimiento, entiendo?
Matrona Se planteará como estrategia.
Sole Exacto.
Matrona ¿Tú sabes cómo pedirlo?
Sole Con todo el morro. Enviaremos un correo y lo solicitaremos.
Matrona Ok. Gracias.
Claudia Acompañamos a Sole a Madrid, donde se juntará con un grupo de la Red Internacional de matronas. Su correo ha surtido efecto y están citadas con Toni Morillas, la directora del Instituto de las Mujeres.
Toni Morillas Hemos tenido reuniones con organizaciones profesionales, la Federación de Matronas, o de Enfermería, pero también colegios profesionales como el Consejo General de Colegios de Médicos, la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia...
Y esos encuentros han sido probablemente los más ricos, porque han permitido el contraste.
Sole Ahí está. Hola.
Toni Morillas Hola. ¿Qué tal?
Sole Hola, buenos días.
Toni Morillas Yo soy Toni... Encantada
Sole Encantada y gracias por recibirnos.
Bueno, os tuteamos, si os parece bien. Venimos a hablaros de la propuesta de los centros de nacimiento. Venimos de Valencia, ha habido mucha movida, no sé si os habéis enterado por la prensa... Que eso de la violencia obstétrica, que lo quiten...
Toni Morillas Me suena.
Sole Te suena, ¿verdad?
Toni Morillas Nosotras nos somos ingenuas. Sabíamos que abrir un debate sobre la violencia obstétrica es un debate apasionado. Pero nos ha sorprendido los posicionamientos en algunos sectores, con comunicados... En fin.
Aquí no estamos hablando de la culpa. Estamos hablando de un modelo que hay que transformar.
Sole Entonces, ¿cómo abordamos esto? Nosotros, como profesionales, buscamos soluciones reales. Necesitamos espacios seguros para dar el nacimiento. Me interesa mucho que sepáis qué es un centro de nacimientos, porque en la prensa dicen barbaridades.
¿Qué es un centro de nacimientos? Es una unidad liderada por matronas. Esto no es una casita, o un entorno con pelotas ni con una bañera. No: esto es un cambio de modelo.
Toni Morillas Sí, te entiendo. Hay que cambiar la cultura y hay que cambiar, entre otras cosas, la cultura de atención al parto. Y eso se construye, no solo señalando que el porcentaje de episiotomías está por encima de tal... Sino intentando trabajar en torno a las buenas prácticas.
Sole Lo estás definiendo totalmente.
Toni Morillas Qué otros modelos asistenciales existen en este país y en nuestro entorno que nos permitan extraer otras maneras de hacer, más respetuosas...
Sole Están implantados en toda Europa, Toni. Evidencia, hay múltiple. Claro, las matronas estamos todas locas, intentando que esto salga. Porque es dejarnos hacer lo que sabemos hacer, que es acompañar a las mujeres, y que muchas veces no nos dejan.
Sinceramente, Toni, tengo miedo de que se quede en la modificación de la ley de salud sexual, y que de “reproductiva” no se ponga nada.
Y si un párrafo pudiera hablar de recomendar la implementación del modelo de los centros de nacimiento para la atención de mujeres de bajo riesgo, nosotros hemos hecho todo lo que teníamos que hacer. Solamente pedimos eso.
Toni Morillas A mí me gustaría salir de aquí diciendo: «Nuestro compromiso es que en la ley van a figurar los centros de nacimiento». Yo no puedo salir de esta reunión diciendo esto, y creo que esto lo sabéis.
Pero sí tenéis nuestro compromiso de que el bloque de violencia obstétrica va a estar y que, en ese marco, en la parte que podamos, vamos a empujar para que modelos de intervención como el que estáis planteando puedan tener presencia.
Sole A ver si podemos hacer alguna cosa.
Claudia En este momento, el contenido de la reforma de la ley es una incógnita. Pero sí que conocemos el compromiso del Ministerio de Igualdad de introducir en nuestra legislación los instrumentos para erradicar la violencia obstétrica.
Este es el mandato de Naciones Unidas.
Toni Morillas Por tanto, tenemos que hacernos la pregunta de qué es lo que ha fallado, y yo creo que el Comité CEDAW nos da algunas pistas.
Uno, tiene que ver con la formación de los profesionales y, para esto, hacen falta programas de formación continua que tengan enfoque de derechos humanos y de género.
Luego, un segundo instrumento, que es que pueda haber recogida de datos. ¿Qué es lo que sucede, por qué hay hospitales donde se incrementa el número de cesáreas, de episiotomías...?
Y en tercer lugar, establecer un protocolo común de actuaciones. Que aquello de “la mejor evidencia científica” se garantice.
Nos hemos intentado fijar en lo que plantea el Comité CEDAW, hemos intentado seguirlo al pie de la letra.
Claudia Es una reforma muy amplia, que regulará el derecho al aborto, la salud menstrual, la financiación de anticonceptivos... Necesita el consenso dentro del gobierno, la coordinación con el Ministerio de Sanidad, los votos suficientes en el Congreso...
Toni Morillas Bueno, yo creo que solo el reconocimiento de la violencia obstétrica... ese es nuestro principal objetivo. Si lo logramos, va a ser histórico.
Sole Histórico.
Toni Morillas Y, a partir de ahí...
Sole Vendrá todo, es verdad.
Toni Morillas Hay un campo de trabajo...
Sole Inmenso.
Claudia La semana que viene, cerramos este capítulo y esta temporada de Parir en el siglo 21.
Lucía «Parir en el siglo 21» es un pódcast de Barret Cooperativa.
Este capítulo está producido por Claudia Reig y Àlex Badia –que también hizo la música–, y editado por Dani Fabra.
El diseño sonoro y la mezcla son de Marc Arenas. Vicent Ibáñez hizo la web.
Barret, además, somos Lucía Fos, Vicent Peris, Paula Rausell, Dani Palau y Lucía Ros.
Seguimos en el próximo capítulo de «Parir en el siglo 21». Hasta pronto.